Estos certificados son un recurso valioso para muchas empresas, permitiéndoles concretar sus esfuerzos en términos de sostenibilidad, compensar la huella de carbono con una certificación con validez internacional, trazable y que impulsa el uso de energías limpias en toda la cadena de suministro e incentiva la inversión en proyectos de generación sustentables. Además, aportan confiabilidad, reputación y reconocimiento.

Frente al desafío de avanzar hacia una mayor utilización de fuentes de energía renovables y frenar el avance del cambio climático, las empresas están adoptando distintas herramientas para tener operaciones más sostenibles y medir su impacto, ejemplo de ello son la certificación internacional I-REC Standard.

Esta certificación, que actualmente ofrecemos en IMELSA ENERGÍA, está marcando una diferencia importante en el panorama energético, ya que no son muestra del compromiso de estas empresas en la promoción de energías renovables.

“Cada vez más empresas buscan compensar sus emisiones de carbono mediante el uso de energías renovables, como parte fundamental de la transición hacia una matriz energética más limpia y sostenible. En este contexto, los certificados I-REC no solo agregan valor al permitir que nuestros clientes materialicen sus esfuerzos en sostenibilidad, sino que también aportan confiabilidad, reputación y reconocimiento a nivel internacional”, asegura Rodrigo Moya, Gerente General de IMELSA ENERGÍA.

Este certificado de energía renovable internacional, que se recomienda siguiendo los estándares del Protocolo de Gases de Efecto Invernadero, ofrecen múltiples ventajas al fomentar el uso de energías limpias en toda la cadena de suministro, impulsar la eficiencia energética en las operaciones y desempeñar un papel clave al respaldar tecnologías menos contaminantes.

El estándar está presente en más de 40 países y cuenta con más de 2 mil plantas registradas en el mundo. En Chile, esta solución está cautivando el interés de cada vez más clientes. Prueba de ello es que la cantidad de plantas que se han inscrito en la Bolsa del Clima de Santiago -ente encargado del registro y la emisión local de certificados- paso de 100 en 2022 a 140 en junio de 2023.

Además, la cantidad de energía que hemos suministrado en IMELSA ENERGÍA con certificación I-REC ha crecido sustancialmente, generando un impacto directo en el medio ambiente al evitar la emisión de aproximadamente 54,000 toneladas de CO2 a la atmósfera.

¡Seguimos trabajando juntos para impulsar la transición energética que Chile necesita!